Sería un mundo perfecto si nuestros automóviles y camiones nunca requirieran un mantenimiento y servicio de rutina, pero desafortunadamente esa no es la realidad. Nuestros vehículos requieren un nivel de cuidado específico para preservar y mantener la apariencia, el rendimiento y, lo más importante, la seguridad. El mantenimiento de rutina, como el reemplazo de las escobillas del limpiaparabrisas, el lavado del radiador, la rotación de neumáticos, los cambios de aceite, los ajustes, etc., son esenciales para la conservación general del vehículo.

Presta especial atención a los frenos

Uno de los componentes más importantes para mantenerse en buen funcionamiento y en condiciones seguras es el sistema de frenos. Este sistema requiere una atención especial para mantenerlo seguro en la carretera y proteger su inversión. Si descuida los frenos de su automóvil, no solo puede causar más daños a su vehículo, sino que también puede provocar la pérdida total de su automóvil. Esto se debe a que, en muchos casos, cuando es necesario reemplazar un sistema de frenos completo, el costo puede exceder el valor total del vehículo. En esta situación, la mejor opción para una persona es vender todo su automóvil a un comprador de automóviles no deseado, comprar otro vehículo y luego dedicarse a un programa de mantenimiento de frenos de rutina para evitar daños en las líneas de freno.

Tan pronto como empiece a notar signos de problemas en los frenos, lleve su automóvil a un taller de carrocería profesional para que lo inspeccionen antes de que el problema pueda causar daños generales al automóvil. ¿No conoce las señales que sugieren que los frenos de su automóvil deben ser reparados? ¡Siga leyendo para conocer los más comunes a los que debe prestar atención mientras conduce!

¿Reparación o reemplazo?

Para comprender cómo identificar o detectar problemas de frenos en su vehículo, primero es útil comprender los componentes básicos del sistema de frenos de un automóvil. Hay cuatro partes generales: la abrazadera hidráulica, la línea de líquido de frenos, las pastillas de freno y los discos de freno. Algunos pueden argumentar que las pastillas de freno y los rotores son en realidad parte de la rueda, pero en este caso siempre los incluiremos ya que pueden influir en la necesidad de reparar los frenos. En la mayoría de los casos, las líneas de freno y la abrazadera hidráulica no sufrirán mucho desgaste; están construidos para durar mucho tiempo. Por otro lado, las pastillas de freno y los rotores pueden desgastarse en cualquier momento y deberán ser reemplazados cada pocos miles de kilómetros aproximadamente.

Son propensos a deteriorarse cada vez que conduce, ya que la pastilla presiona contra el rotor de metal liso cada vez que se aplica el freno. Con el tiempo, esta almohadilla se desgasta y hará un ruido reconocible para alertarle de que está baja. Las pastillas de freno chillan o silban cuando están bajas. El ruido es en realidad el resultado de la almohadilla desnuda que raspa el rotor de metal (el disco de metal que gira en la rueda) y causa fricción entre ellos. Puede comenzar con un leve chirrido y convertirse en un grito agudo si se descuida. Si escucha un chirrido, lo más probable es que la almohadilla esté desgastada por completo y esté rechinando contra el rotor. Esto realmente puede dañar los discos de freno. El grosor de las pastillas de freno, la cantidad de línea que conduce y la forma en que conduce influyen en la cantidad de veces que necesitará reemplazarlas.

Vender un coche chatarra por dinero en efectivo

Si descubre que los frenos de su automóvil están dañados y necesita ser reemplazados, pero el costo excede el valor total de su vehículo, aún puede rentabilizarlo vendiéndolo a un comprador de automóvil no deseado. Elija una empresa que tenga balanzas electrónicas de alta gama que puedan evaluar con precisión el valor de su automóvil chatarra. ¡Entonces use el dinero para otro vehículo!